| 
  • If you are citizen of an European Union member nation, you may not use this service unless you are at least 16 years old.

  • You already know Dokkio is an AI-powered assistant to organize & manage your digital files & messages. Very soon, Dokkio will support Outlook as well as One Drive. Check it out today!

View
 

nostalgiadelaluz

Page history last edited by Víctor Fernández 6 years, 11 months ago

 

“Nostalgia de la Luz” es un film sobre la distancia entre el cielo y la tierra, entre la luz del cosmos y los seres humanos y las misteriosas idas y vueltas que se crean entre ellos. En Chile, a tres mil metros de altura, los astrónomos venidos de todo el mundo se reúnen en el desierto de Atacama para observar las estrellas. Aquí, la transparencia del cielo permite ver hasta los confines del universo. Abajo, la sequedad del suelo preserva los restos humanos intactos para siempre: momias, exploradores, mineros, indígenas y osamentas de los prisioneros políticos de la dictadura. Mientras los astrónomos buscan la vida extra terrestre, un grupo de mujeres remueve las piedras: busca a sus familiares.

 

(hacer click para ver la película)

 

*

 

 

El tiempo experiencial conoce sus límites a través del tiempo histórico, tiempo de la memoria.  El bosque primitivo, habitado de nostálgicas memorias, construye el paisaje humano del presente inmediato. Nostalgia por la luz muestra el tiempo experiencial repleto de ausencias vigentes, rastros de estrellas y desiertos llenos de historia. La historia de Chile se presenta en un plano espacio-temporal cuya incidencia es recurrente en tantos otros países, marca las cotidianas y complejas problemáticas en un microcosmos de experiencias que son capaces de dar sentido a toda una vida que transcurre  en el tiempo finito del humano y representa toda su vida y tiempo. Mundo, tiempo y escala, son textos a partir de los cuales el sujeto se inscribe  y se desplaza en lo que entiende como espacio y vida. Las mujeres que buscan a sus desaparecidos han experimentado una ruptura en el tiempo y se desplazan entre los recuerdos, la historia vivida y la añorada. La ciencia dispuesta a explorar el espacio, entiende el problema de escala entre el ser y el tiempo del espacio que es proporcionalmente incomprensible al tiempo finito del humano.      Cristina

 

Comentario a "Nostalgia de la luz"

El desierto se constituye como un espacio de la memoria, tanto para observar la historia de las estrellas como de la tierra. La tiempo en el desierto se espacializa, se ensancha haciendo notar que el tiempo presente es una ilusión, una abstracción humana para configurar acciones guiadas por intereses particulares (de poder) que borran la percepción de otros tiempos y espacios sobre los que se inscribe. Por un momento el universo y el desierto son idealizados como espacios cósmicos que resguardan información sobre el origen de todo, lo cual no deja de ser una percepción metafísica del entorno, en la que la especulación científica se corresponde con las dudas religiosas. Estas curiosidades son correlativas a un goce humano por el dominio total del conocimiento, el placer del astrónomo se conjuga con el deseo infinito no de encontrar respuestas sino más preguntas, que le permiten extender su experiencia sublime de libertad. La experiencia del arqueólogo creo que es más caótica, porque se topa con una superposición de capas en las que interactúan tanto restos humanos como no-humanos. En este sentido se topa con el olvido, aquello que no se recuerda o no se quiere recordar, aunque puede que afectar directamente a otros. Esto resalta la apropiación humana del desierto y el universo al nombrarlos como memorias históricas, en tanto cúmulo de información esperando a ser identificada y semiotizada; sin embargo, el espacio del desierto es en realidad la continuidad destructiva de lo no-humano. El desierto erosiona los restos y el humano los modifica en su paso a través de él; la luz en el universo permanece, o en todo caso se pierde, pero no estaremos para percibirlo. El desierto fue a la vez (sueño moderno entre el siglo XVIII y XIX) el espacio idealizado del viaje interminable a través de la razón, pero lo que se encuentra en él ahora es la erosión de la propia existencia, el humano que somete al humano y la tierra persiste como suelo no-humano.

Víctor Fernández

 

Consideraciones a propósito de “Nostalgia de la Luz” y “Time” de Robert Markley, por Guillermo PV

 

 

Así como Markley se apoya en Évangéline del poeta estadounidense H.W. Longfellow para departir en torno a las tres nociones de tiempo –encarnado, histórico y climatológico–, las voces de las buscadores en el desierto de Atacama suponen un vaso comunicante al tema. En efecto, el escenario del desierto, en paralelo al comentario de Víctor en el foro, se configura como un espacio de memoria dual, donde la ciencia pretende (des)cifrar el secreto del enigma del conocimiento racional (min. 19) –significando al desierto como metáfora del conocimiento infinito y a la vez como terreno literal de investigaciones– y la búsqueda, por “otro” lado, ya no de cuerpos, sino de huesos de los desparecidos de la dictadora (“Ojalá los telescopios no mirarán sólo al cielo”­–clama una de los buscadores) cuya intersección cristaliza una paradoja temporal, un bucle de tiempo, que, creo yo, podría hospedar aquello que dice Markley en lo tocante al tiempo no-antropogénico y climatológico (p.51). Es decir, al igual que Derrida sostenía que toda guerra (nuclear) se presenta como una guerra contra el tiempo, contra la velocidad, el desciframiento del enigma dual y vertical (el cosmos arriba, y los huesos abajo [no sé por qué me suena insensible decirlo así, más en un contexto donde los “desaparecidos” no nos son ajenos])  el desierto de Atacama representa un litigio entre cuerpos, subjetividades y temporalidades. Cuerpos-signos de la barbarie que atraviesa todo espacio epocal (me viene a la mente la frase de W. Benjamin: “No hay ningún documento de cultura que no sea al tiempo documento de barbarie). Subjetividades que son fracturadas en su relación con la muerte (“Si hoy encontrara sus huesos, mañana me moriría feliz”); y temporalidades que atan todo acontecer a la concepción hegemónica que se quiera imponer sobre él, a propósito de la breve historización que realiza Markley de los tres registros.

 

 

 

 Saludos. 

 

Comments (1)

Juan Carlos said

at 4:20 pm on May 1, 2017

Hola,

En la película (minuto 16:42) se plantea la pregunta: ¿De dónde venimos?, ¿Dónde estamos? ¿Y a dónde vamos?. El astrónomo comenta que hay una diferencia sustancial entre lo científico y lo religioso, abre una serie de preguntas como el origen del hombre, del planeta, del sistema solar y cómo se forma una galaxia a diferentes escalas.
Este es el contexto de escala que Clark menciona en donde se puede perder la dimensión en la búsqueda de respuestas a preguntas demasiado amplias en el sentido de la escala.

Poco más adelante se habla del tiempo y se menciona que el trabajo del astrónomo es un trabajo sobre el pasado, en referencia a las escalas de tiempo que Markley aborda, cuando se habla del estudio de las estrellas la escala de tiempo es en años luz, al ver el sol son 8 minutos pero incluso al estar frente a frente hay un espacio en el tiempo que hace que las cosas no sean simultáneas, el tiempo real no existe desde la perspectiva de una persona.

Saludos cordiales,

Juan Carlos

You don't have permission to comment on this page.